Las tecnologías Blockchain
Publicado el 27th abril 2016
Surgido en un primer momento como sistema para conservar o registrar las transacciones efectuadas en divisas virtuales como Bitcoin, el “Blockchain”, también conocido como cadena de bloques, está despertando cada día un interés mayor por parte de empresas de diversos sectores, estando a la cabeza el sector bancario y el de las instituciones financieras.
El Blockchain puede definirse como una base de datos en la que la información está dividida en bloques interconectados entre los miembros o usuarios de una misma ‘red’ a través de una firma digital. Una de las principales características de este sistema es que el mismo proporciona una mayor rapidez y seguridad que los sistemas similares utilizados a día de hoy a un menor coste. Las altas expectativas generadas por este sistema, así como la falta de regulación expresa a día de hoy sobre el particular, son ejemplos adicionales de cómo las tecnologías de tipo peer-to-peer siguen planteando grandes retos al legislador
Las reacciones por parte de los reguladores no se están haciendo esperar principalmente enfocadas al impacto de esta tecnología en sus diferentes ámbitos. Entre otros, la Autoridad Europea de Valores y Mercados (AEVM) ha establecido un comité permanente de innovación financiera con el fin de buscar un enfoque armonizado entre los reguladores nacionales de los diferentes Estados Miembros.
Por otro lado, el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo publicó un borrador informe sobre las divisas virtuales, que, entre otras cosas, contenía una propuesta de resolución del Parlamento Europeo sobre las monedas virtuales y daba la bienvenida a propuestas de la Comisión Europea para la inclusión de plataformas de intercambio de moneda virtual en la Cuarta Directiva sobre blanqueo de capitales.
Todas estas iniciativas están enfocadas al uso de la tecnología Blockchain por bancos, instituciones financieras y entidades prestadores de servicios de pago al ser este sector en el que el uso y desarrollo de este sistema está siendo más relevante. No obstante, las características y potenciales usos de esta tecnología pueden originar desde implicaciones en materia civil/contractual hasta implicaciones en materia penal debido a la falta de trasparencia de las Blockchain privadas. Se debe tener en cuenta que uno de los grandes riesgos ya percibidos por el sector en relación con esta tecnología sería la potencial modificación y manipulación de datos en registros públicos de transacciones, que minarían la seguridad jurídica de las transacciones en un sector económico que se antoja crucial.
A la espera del posicionamiento de los reguladores, existen opiniones que abogan por regular a la mayor brevedad en este ámbito mientras que otras consideran que hay que dar un margen temporal a fin de conocer el desarrollo este sistema en mayor profundidad. En todo caso, las entidades bancarias, financieras y, en general, las empresas del sector Fintech, así como aquellas otras que pretendan desarrollar su negocio mediante el uso de sistemas Blockchain, deberán informarse sobre las implicaciones de esta tecnología en todas aquellas jurisdicciones en las que estén presentes con el fin de incluir obligaciones contractuales y procedimientos para respetar la legislación vigente, así como para dar cumplimiento, entre otros, a los requisitos de transparencia, protección de datos y protección de los consumidores.
Por último, los legisladores tanto a nivel europeo como nacional deberán tener presente el alcance de esta ‘tecnología’ y su potencial aplicación en diferentes ámbitos como el Cloud Computing, Internet de las cosas (IoT), medios de pago, Fintech, contratos inteligentes (Smart Contracts), usos en el campo de la medicina, gestión de derechos de propiedad intelectual, a la hora de legislar. La gran variedad de aplicaciones de esta tecnología en diferentes ámbitos puede conllevar la necesidad de adoptar importantes modificaciones tanto en la legislación nacional como comunitaria, entre otras, en materia de protección de datos y protección de los consumidores, o E-commerce.
En todo caso, la potencial regulación material no se espera a corto plazo, lo que conllevará que las empresas que utilicen este tipo de tecnología deban permanecer muy pendientes de las implicaciones legales que sus servicios pueden conllevar de acuerdo con la interpretación o potencial reinterpretación de la regulación actual, especialmente en materias ‘sensibles’ como las apuntadas anteriormente.